Mi trabajo se trata de un diario personal en el que plasmo mi estado de ánimo en el 2013.
En un principio mi proyecto trataba sobre la temática de los que tenemos 40 años, concretamente mi grupo de amigos, en el que quería reflejar la vida cotidiana, las relaciones entre amigos, modus vivendi etc. Me fui dando cuenta que para abordar esta temática hace falta mucho más que ir una día a casa de unos amigos a hacerles fotos, faltaba un conocimiento más profundo de las personas, su intimidad y de mi posición respecto a ellos y el tema que había elegido. También me encontré con algunas dificultades tanto técnicas como estéticas, el cómo abordar de manera conceptual el trabajo de una manera menos explícita y la falta de experiencia con un proyecto de larga duración me impedían ir más allá. El resultado fotográfico de todo esto era una sucesión de anécdotas en las que era difícil establecer un hilo conductor de la historia y en las que yo nunca salía aun siendo una parte integrante de esta historia. Quizás siga con esa historia pero desde otro punto de vista.
Ahora viene la pregunta...
¿Cómo pase del proyecto de mis amigos a un diario personal?
En una de las últimas revisiones tuve que escoger unas 15 fotos, las que a mí me parecían las más potentes estéticamente, las que salieron había una mezcla de fotos hechas a mis amigos y otras que no parecían encajar en la temática, algo que yo en su día califiqué de "mis paranoias".
De esas 15 fotos tuve que elegir las 4 que para mi tenían más significado y efectivamente me quedé con "mis paranoias" un tipo de fotos totalmente diferentes en las que me di cuenta que para entender a los otros primero hay que entenderse uno mismo tomando consciencia del proceso. Fue muy emocionante.
Así pues a falta de un mes para terminar el curso iniciaba un nuevo camino en el que debía seguir lo que sentía trabajando la sugerencia y la evocación, me había quedado con 4 fotos aunque no fue muy difícil seguir ese camino, porque todo estaba en mi interior.
Tarde o temprano llega un punto de la vida en la que uno se pregunta ¿Qué está pasando? La incertidumbre y los miedos que vienen del mundo externo, ¿de dónde sale esa melancolía? La muerte de mi abuela a principios de Julio, la fragilidad de la vida, el alma que se rompe y se recompone, la esperanza y una parte muy importante de mi vida que es mi pareja compartiendo todo eso.
La vida nos suma y nos resta, es un árbol, sus ramas se dividen y sus hojas se multiplican.
En un principio mi proyecto trataba sobre la temática de los que tenemos 40 años, concretamente mi grupo de amigos, en el que quería reflejar la vida cotidiana, las relaciones entre amigos, modus vivendi etc. Me fui dando cuenta que para abordar esta temática hace falta mucho más que ir una día a casa de unos amigos a hacerles fotos, faltaba un conocimiento más profundo de las personas, su intimidad y de mi posición respecto a ellos y el tema que había elegido. También me encontré con algunas dificultades tanto técnicas como estéticas, el cómo abordar de manera conceptual el trabajo de una manera menos explícita y la falta de experiencia con un proyecto de larga duración me impedían ir más allá. El resultado fotográfico de todo esto era una sucesión de anécdotas en las que era difícil establecer un hilo conductor de la historia y en las que yo nunca salía aun siendo una parte integrante de esta historia. Quizás siga con esa historia pero desde otro punto de vista.
Ahora viene la pregunta...
¿Cómo pase del proyecto de mis amigos a un diario personal?
En una de las últimas revisiones tuve que escoger unas 15 fotos, las que a mí me parecían las más potentes estéticamente, las que salieron había una mezcla de fotos hechas a mis amigos y otras que no parecían encajar en la temática, algo que yo en su día califiqué de "mis paranoias".
De esas 15 fotos tuve que elegir las 4 que para mi tenían más significado y efectivamente me quedé con "mis paranoias" un tipo de fotos totalmente diferentes en las que me di cuenta que para entender a los otros primero hay que entenderse uno mismo tomando consciencia del proceso. Fue muy emocionante.
Así pues a falta de un mes para terminar el curso iniciaba un nuevo camino en el que debía seguir lo que sentía trabajando la sugerencia y la evocación, me había quedado con 4 fotos aunque no fue muy difícil seguir ese camino, porque todo estaba en mi interior.
Tarde o temprano llega un punto de la vida en la que uno se pregunta ¿Qué está pasando? La incertidumbre y los miedos que vienen del mundo externo, ¿de dónde sale esa melancolía? La muerte de mi abuela a principios de Julio, la fragilidad de la vida, el alma que se rompe y se recompone, la esperanza y una parte muy importante de mi vida que es mi pareja compartiendo todo eso.
La vida nos suma y nos resta, es un árbol, sus ramas se dividen y sus hojas se multiplican.